Ingeniería hidráulica de una civilización pre-Inca para salvar a Lima de la sequía

La tecnología de nuestros hermanos mayores, es una opción viable para salvar a los limeños de la penuria de agua a la cual no pueden hacer frente con sus tecnologías reciente venida de todos lados del mundo. La solución está en nosotros mismos, así lo demuestra un estudio del científico de De Bièvre y Gena Gammie, publicado el 15 de abril 2015 en la New Scientist.

Con estos estudios científicos, se refuerza la proposición para poner en marcha nuestro legado pre-Inca e Inca en diferentes disciplinas (Leer: El modo de vida de los Quechuas e Incas en el siglo XXI (I) y (II))

La publicación de New Scientist afirma que el "renacimiento de tecnología hidráulica pre-Inca en las montañas de los Andes" seria una opción "para paliar la sequía de la capital peruana, Lima".

Esta técnica barata, será financiada por la empresa pública de servicios de agua en Lima, SEDAPAL mediante la adopción de 1% de sus gastos para los próximos cinco años. Los costos se estiman en 23 millones de dólares. "Lima tiene penuria de agua durante siete meses del año y, durante los otros cinco meses, el río Rímac, Chillón y Lurín, que pasan por Lima hasta el Océano Pacífico, con regularidad causan inundaciones y huaicos [en el mes de marzo, en Chosica se produjeron huaicos, causando muertes de personas, ndlr]".

Según De Bièvre, las investigaciones hidrológicas están en su curso. “Hemos estado inyectando tinta en el agua del canal para ver dónde sale". El investigador confía que el proyecto podría volver a nacer 50 "amunas", principalmente en la cuenca de Chillón.

Las amunas

Ingeniería hidráulica de una civilización pre-Inca para salvar a Lima de la sequía

La revista y portal francés Science et avenir hizo eco de esta buena alternativa: "A pesar de toda nuestra tecnología, somos incapaces de ofrecer una mejor respuesta a la penuria de agua sufre Lima (Perú), que aquella que fue inventada hace mucho tiempo por los Huari (o Wari). Esta civilización precolombina, e incluso pre-Incas vivieron en la región andina entre 500 y 1000  años después de Cristo. En ese época, para hacer frente a al clima muy particular de Lima - uno de las más desérticas, a pesar de que la ciudad se encuentra en una zona subtropical y, a sólo 80 metros sobre el nivel del mar".

Por otro lado, el mismo portal adiciona: "Los  Huari desarrollaron un sistema hidráulico ingenioso: los: "amunas". Su principio es simple: el agua de lluvia de la montaña es capturado en una cuenca. Esta cuenca está conectada a varios puntos situados más abajo, hasta Lima, por una serie de pequeños canales subterráneos a base de piedra. El agua se filtra lentamente en las rocas y el agua vuelve a salir durante todo el año en la parte inferior".

Análisis de los hidrólogos

Además, la sequía habría aumentado en los últimos años debido al calentamiento global. Este calentamiento produce el deshielo de los glaciares, que alimentan habitualmente a los ríos y, éstas son las que aprovisionan de agua a Lima. El consorcio Condensan (es una organización comprometida a superar la pobreza y la exclusión social de la región andina a través de la gestión sostenible de los recursos naturales) con sede en Lima, a estudiado el mejor medio para paliar la penuria de agua que enfrentan los casi 10 millones de personas que  viven esta parte del Perú. Y los hidrólogos están convencidos: "es necesario volver a utilizar el antiguo sistema de Huari. Los amunas, que habían caído en estado ruinoso durante mucho tiempo, sólo necesitan ser renovado. Para ello, los investigadores sugieren rehacer las juntas con cemento alrededor de los canales". También, "la idea es construir un "desfase" en el sistema hidrológico, lo que retrasa el escurrimiento del agua durante semanas o incluso meses", dijo Bert De Bièvre de Condensan en la revista New Scientist.
Ventajas

Según el estudio, la solución de los "amunas" sería de lejos la opción más barata: cuesta menos de una centésima parte que el agua de la nueva planta de desalinización de agua de mar.

Otra ventaja: Vaciando de manera gradual el agua de las cuencas de la montaña, se evitará que la temporada de lluvias (los otros 5 meses del año) los ríos se desbordan e inundan la ciudad. 

Al final, según un estudio realizado por Bert De Bièvre y Gena Gammie, especialista en agua de Forest Trends, una ONG con sede en Washington, reutilizar las "amunas" debería aumentar el suministro de agua de 26 millones de metros cúbicos, reduciendo así el déficit en agua corriente en la ciudad durante la época de sequía de casi el 60%.  También, los científicos llaman a reordenar  las montañas: hacer revivir los bosques, las zonas húmedas y las antiguas terrazas agrícolas, limitando el pastoreo de ganado.

Un sistema hidráulico antiguo de 1 500 años va solucionar el problema de falta de agua.

Otro medio que le dio cobertura a esta noticia fue el diario francés Direct Matin. El columnista Jean-Marie Colombani, escribe: "Con el calentamiento climático, los glaciares que les aprovisionaban han fundido y los recursos en agua de Lima son intermitentes".
El agua brota gracias a los mayores. Direct Matin, 17/04/2015.
La técnica de los Huaris, lejos de ser simple, es compleja. "Este pueblo habían imagina un sistema complejo que retenía el agua descendiente de la montaña durante la temporada de lluvias a través de las cuencas y de canales para hacerlo ascender a la superficie durante semanas o meses más tarde", afirma Colombani.

El modo de viva de las civilizaciones pre-Incas e Incas, tienen mucho de actualidad a pesar de los años pasados y, continuará así, si ponemos en ejecución como una alternativa que se puede aplicar en el Perú y en otros lados del mundo.

Para conocer más, los siguientes videos explican el sistema llamado "amuna".

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